Comenzamos un viaje lleno de nuevas experiencias y descubrimientos. 0-1
¿QUÉ ES?
El cesto de los tesoros es una propuesta de juego ideada por Elinor Goldschmied que ofrece a los niños/as en el primer año de vida (cuando son capaces de mantenerse sentados) la posibilidad de descubrir el mundo a partir de su propia actividad.
Es una actividad sistematizada que responde a la demanda de exploración y actividad autónoma (no dirigida) de los niños, poniéndolos en contacto con una variedad de objetos y elementos adecuados, que no tiene una finalidad única y predeterminada, sino que ofrece el máximo de oportunidades de estimulación del desarrollo infantil.
La posición de estar sentado aporta al bebé un nuevo punto de vista, un mayor dominio sobre su entorno inmediato, sus ojos y sus manos alcanzan todo mucho mejor.
¿CUALES SON SUS OBJETIVOS?
Sólo puede tocar aquello que los adultos ponemos a su alcance. Así cobra gran importancia el cesto de los tesoros, como fuente de estímulo y de conocimiento, aprovechando esa inamovilidad que tanto favorece la concentración del niño.
Los objetos y materiales diferentes son seleccionados cuidadosamente para que proporcionen al niño una amplia gama de experiencias sensoriales que estimulen sus cinco sentidos, y sus primeros movimientos corporales.
Con los objetos del cesto, por su variedad de formas, texturas, colores, olores, peso, sabor, temperatura y consistencia, estimulan los sentidos y las capacidades (motrices, cognitivas, comunicativas...) de los bebés, lo que facilita su desarrollo.
¿CÓMO COLABORAN LAS FAMILIAS?
El juego heurístico propicia la colaboración y relación de las familias con la escuela, aportando los materiales.
El material del cesto de los “tesoros” es de fácil adquisición, y a su vez el bajo coste, ya que muchos de estos materiales son objetos que tenemos en casa y que podemos recuperar o reciclar, o directamente de la naturaleza: piedras, castañas, corchos, trozos de esponja, conchas, peines, cajas, botones grandes, cepillos, pinceles, pinzas de la ropa, bobinas de hilo, etc.
Estos objetos son considerados como verdaderas herramientas de aprendizaje, que se tienen que renovar, en parte, cada 15 días, puesto que la presencia prolongada de un mismo objeto ya no satisface la curiosidad del niño ni estimula su interés.
¿EN QUE CONSITE?
La sesión del cesto de los tesoros tiene una duración de 30 minutos en la cual se ofrece un cesto o caja con objetos de diferentes materiales, pesos y texturas para que los bebés experimenten. Los educadores están muy pendientes de los bebés para evitar que se metan en la boca objetos pequeños.
En este juego, los niñosmanipulan elementos de la naturaleza o de su entorno cotidiano..